De las chispas que encienden un Arcoiris

Cuando una pasión adquiere cuerpo y alma propia, acto seguido,  reclamará salir a conocer el mundo exterior y a su vez a darse a conocer por él.

Así iniciará a pasos titubeantes un recorrido con la única opción de impulso hacia adelante, hacia esos infinitos caminos que con ojos nuevos puede vislumbrar en ése, su primer amanecer.

Gracias a los fueguitos que con su luz y calor mantuvieron esa llama literaria siempre viva en mí. Hoy es inextinguible y reclama su lugar en el mundo.

Así emerge desde las profundidades una primera chispa buscando el oxígeno prometido a su nacimiento. 

Un pequeño preludio, no musical pero sí poseedor de magnífica melodía:

We shall not cease from exploration, and the end of all our exploring will be to arrive where we started and know the place for the first time. T.S. Elliot


10 pensamientos en “De las chispas que encienden un Arcoiris

  1. Los murmullos del arcoíris-Iris, cobran voz, emergen con impulso inusitado envolviéndonos en esa pasión tan tuya por dar, darse en un relumbrante amanecer. Te daremos también nuestro oxígeno para compartir esta melodía de tu alma! Aquí estamos y estaremos amada Iris.

    Me gusta

Deja un comentario